Esta es la historia del poeta enamorado, que es a la vez un poeta muerto he inexistente.
Vemos a una pequeña que arruga un papel impreso con fuerza. El papel guarda unas cuantas letras enamoradizas y desempolva algunos sentimientos en nuestra ilusa protagonista.
En la búsqueda inconsciente de nuestra desesperada que quiere sentir y conmoverse, se topa con varios imbéciles que le hacen enviar ese papelito bien lejos.
El papel se deshace en un charco que lo debilita, en el estado perfecto donde deben estar las mentiras.
la ñiña, llora mientras pisotea y salta sobre el charco.Las rosas entre tanto se van marchitando,, el sol seca los trozos de papel que quedan, las letras borrosas se confunden con aquellas que se escuchan claras en el cerebrito de nuestra pequeña:
Los grandes impostores son todos los artistas pretenciosos.
El hombre que le ha dado tal poema es un estafador; dentro del oficio ejerce papeles de titiritero, cuentero, engatusador y poeta. Es tan vil que el crédito de sus versos son tomados de los grandes maestros.
Pero al parecer el engaño que se le ha realizado a nuestra pequeña es una mínima mentira, mas se convierte en gigantesca cuando un artista se suplanta y se disfraza con su traje.
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