lunes, 25 de abril de 2016

Adentro,
Donde el silencio resuena como un torbellino que va  fulminando la ilusión,
Afuera,
Donde el reflejo de nuestra conciencia se manifiesta,
En el presente,
Donde la unión se experimenta.

Atravesando esta cueva, me hallo con una fuente de agua vital, que me permite desterrar al ego de su antigua posición, desnuda, con el corazón descubierto me entrego al servicio, siendo humilde, aceptando a los demás como iguales, conectandome desde algo muy profundo y esencial, la luz divina.

Quiero erradicar a toda costa el sentimiento de superioridad y llegar a una comprensión universal desde el amor incondicional, adquiriendo humildad.

Porque Dios es el sabedor sin límites, que yace en la conciencia de todos los espíritus de la naturaleza, dios es la vida del universo, el continuo ciclo,el origen eterno  y supremo.

La mente de Dios se encuentra latente en su  creación, en cada instante de la espiral...

Las profundidades son inmanentes a él, la plenitud es la facultad más maravillosa que le puede describir, porque nada puede reemplazar su magnificencia, su voluntad se lleva a cabo en toda dimensión de existencia, la luz que ilumina cada partícula, del eterno disfrutador amoroso, la paz que se siente desde la iluminación de la ignorancia, abriendo un campo unificado donde toda posibilidad tiende a evolucionar.

Todos los seres alaban su belleza porque reconocen que el es el todo que les da sustento, el libertador de la conciencia, el amor más puro, el más trascendente de los vivientes, el infinito, eterno, incondicional, el amo integrador el espíritu manifiesto, el todo.

Misterio profundo, hermosura plena, amor inagotable, te quiero experimentar ,quiero sentirte plenamente desde mi sanidad interior.