viernes, 3 de junio de 2011

Dioxido

Hay dos cuerpos humanos atrapados en la caja de Schrödinger, pero esta vez los tenemos en un auto y los vemos desde un cuarto piso de un gran edificio.
ellos están inmóviles, tendidos sobre las sillas reclinadas y amobladas, no se distingue con claridad el tono de sus rostros ni el color de sus labios, no podemos mirar el movimiento de su estomago que provoca la respiración; la mujer esta boca arriba en el puesto del copiloto, el piloto de medio lado parece tener un sueño profundo.
y sin embargo ninguno puede asegurar su muerte o su vitalidad.
-están muertos se los juro...
se lo dije a mis compañeros que veían cuando yo señalaba el carro,se reían y se reían de mi.
-bien, voy a comprobarlo, entonces tomo el ascensor y camino directo al parqueadero.
me acerco al carro y me empino un poco, les detallo sus cuerpos morados, sus cuerpos descolgados.
están muertos.
no hay probabilidad que le de paso a otra afirmación, están envenenados.

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