Es en la vida donde se desarrolla esta narrativa excitante que oscila entre la locura y la cordura.
¿Y que puede ser más locuaz que la locura misma?
¿Quien podria explicar la fuente donde se desatan las emociones sino la locura?
¿Cómo se expresaria el amor sino fuera por un poco de locura penetrandolo?
Es que esta comedia es un juego de divinos compases donde los dedos desatan historias, ilusiones y visiones.
Y cual es el sentido de nutrirse de la naturaleza sino es el de reconocerse como aprendiz eterno de ella.
Es una simulación tan bien elaborada que interpretamos los roles que nos corresponden con especial soltura, pero cuando debemos someter nuestra voluntad a otro contexto nuestra propia identidad queda en duda.
Creo que la mente puede erigir paraísos e inframundos y que de nosotros depende habitarlos, exorcizarlos o idolatrarlos.
Somos los escultores de el destino, los actores, creadores y experimentadores de nuestra obra.
Nadie es más responsable que nosotros mismos.
No hay cabos que nos aten más allá de nuestras cadenas autoimpuestas.
No existe nadie más que tú, expresado en miles de formas, miradas, reflejos y contextos.
Ese habitante de la calle, también eres tú como eres el faquir o el erudito.
Todos hacen parte de ti. y tu eres parte de ellos.
O ¿Acaso la composición de tu cuerpo no es unidad cuando encuentras a otra parte tuya que andaba buscándote para volver con tigo en un intercambio de semillas de vida?
Dime que eres tú, porque yo ya se que eres yo.
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