lunes, 24 de octubre de 2011

Nunca noche.

La mujer inasequible tiene una cicatriz en la mano en forma de corazón;
baila tangos y seduce a la noche impenetrable; su sudor tiende a caer en los techos de las casas abandonadas; gotas que luego los noctámbulos recojeran en silencio y con cuidado en sus libres expresiones.
la pretenciosa mujer que mucho encubre, guarda sus mejores ideas para quien las desee con desdén en la hora desesperada de las transformaciones.
 Le rinden cabezas para recibir inspiración, que luego pagaran  desgarrandose las articulaciones.
Entre el obstinado desenfreno de los días, ignoran a Luna, mujer temida.
Hasta que llega ella a abarcar todos los sueños; es hay la reina expectante,quien forma los deseos de los ilusos, he ilumina los pasos irreales de los perturbados.
Repetidos sobresaltos de un ciclo del que todos son esclavos y ella la dueña; pocos son los valientes que la perciben porque saben que el miedo al desamor los destruirá antes de que ella sea suya. La Luna, Mujer codiciosa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario